COTORRA

PRESENTA

El abrazo de la luna

Yo, Luna, quiero contarte que acompañé a unos viajeros hasta la región del Egeo.

Al mismo lugar en donde miles de años antes había visto cómo Dédalo pegaba con miel las alas con las que volaría junto a su hijo, Ícaro, para alcanzar el cielo, y el mismo sitio donde había dedicado noches enteras para construir el Laberinto del Minotauro.

Estos aventureros modernos iban en busca de telas. Emocionada, les conté la historia de Teseo, quien había entrado al laberinto para matar a la mítica bestia y convertirse en héroe, y cómo, desenrollando discretamente un hilo de lana, fue el primer hombre que pudo salir de ese lugar.

Los tiempos de estos viajeros eran distintos. Ahora parecía que el hilo de seda dejado por el héroe griego había sido la semilla de toda una tradición: en cada calle había decenas de artesanos trabajando detrás de telares, ocupados en crear los más finos textiles.

Los viajeros caminaron para verlo todo. Rondaron el lugar hasta que en un callejón encontraron lo que estaban buscando. Escogieron sus telas, las metieron en una mochila y esa misma noche se fueron a nadar al mar.

Apurada, trabajé en darles un regalo. Con las telas que habían escogido confeccioné unas toallas. Al secarse, sintieron lo que nunca habían sentido. Era el más suave de mis abrazos.

El sol estaba por salir y yo debía retirarme a emprender otras aventuras. Sin embargo, les dejé mi recuerdo para siempre.

En algunas ocasiones, los viajeros sacan de su mochila esas telas y comparten mi abrazo mientras yo los veo desde el cielo.

Proceso

Marcha turca

“Barcelona, España. Música. Una cálida noche de verano. El mar”, así definen los creadores de Cotorra, la marca que protagoniza nuestra Colaboración Diecisiete, los inicios de la firma. Ese estado de ánimo los acompañó hasta la región del Egeo, en Turquía, a la llamada “Tierra de la Eternidad Azul”, en donde realizaron un viaje que representó una verdadera revelación.

“Mientras paseábamos por los estudios de los artesanos locales —a través de numerosos talleres pequeños en donde durante siglos se han producido las telas de algodón más exquisitas— vimos a esta gente y su herencia con otros ojos”, recuerdan en entrevista, “aquí, junto al mar azul del oeste de Turquía, nos dimos cuenta de la historia, la tradición y la artesanía de la producción de telas turcas. Queríamos llevarnos este sentimiento a casa.”

Lo hicieron. En 2019 surgió Cotorra, una marca con una filosofía muy clara: “En nuestro estudio, con sede en Barcelona, nos dedicamos a crear una experiencia única, centrándonos en la calidad superior, una base ética, procesos de producción ecológicos y diseños contemporáneos. Reducir el consumo excesivo y presentar un producto sustentable es y será siempre nuestro objetivo.”

En la Colaboración Diecisiete de Loona presentamos una selección de algunas de sus piezas más emblemáticas, las toallas y batas hechas a mano, en telares tradicionales, en la región del Egeo de Turquía.

Al hablar de la materia prima con la que dan vida a sus diseños, aparecen el lino y el algodón, opciones que están en sintonía con el ADN de la firma. “Solo trabajamos con tejidos naturales pues son renovables, biodegradables y neutros en carbono. Además, solo usamos aquellos que cuentan con el certificado OekoTex Standard 100 que garantiza que no se utilizan sustancias nocivas en el proceso de producción”. Este proceso garantiza además piezas que son extremadamente suaves y absorbentes.

Sus empaques también plasman el compromiso que han hecho con el medioambiente, como lo cuentan: “Es algo crucial en la búsqueda de un impacto sustentable. Por lo tanto, tenemos una política 100% Non-Plastic”. En el caso de Loona, esta Colaboración viene dentro de unas prácticas bolsas de playa.

Es así como en nuestra Colaboración Diecisiete por Cotorra encontraremos piezas que nos ayudan a tener un consumo más responsable, como también lo afirman sus creadores: “Son para siempre; tienen diseños y colores modernos pero a la vez atemporales.”

Colaboradores

Cotorra

La marca surgió en Barcelona en 2019 con el objetivo de reducir el consumo excesivo y presentar productos sustentables. Sus batas, toallas y piezas de loungewear son elaboradas a mano con auténticas telas turcas fabricadas en la región del Egeo de Turquía de manera tradicional. ¿El resultado? Una textura extremadamente absorbente y suave que garantiza la mejor experiencia y durabilidad.